¿Te apetece compartir un café entre escorpiones y tarántulas?

¿Te apetece compartir un café entre escorpiones y tarántulas?

¿Te apetece compartir un café entre escorpiones y tarántulas?

¿Te apetece compartir un café entre escorpiones y tarántulas?

Si has dedicado mucho tiempo a explorar cualquiera de las ciudades más grandes de Asia, seguramente conocerás de sobra el concepto de tomar un café con animales. Esta industria enfocada a los selfies aún no se ha convertido en algo demasiado habitual en Camboya, ya que casi todos los locales son establecimientos cafeteros tradicionales, como Starbucks, cafeterías independientes como Tini y una excelente cadena local se llama Brown. Y no vas a toparte con un suricato, un búho o un escorpión en ninguno de ellos.

Esto ha servido de gran ventaja para «Reptile Café», un pequeño local que abrió las puertas hace poco en un callejón del barrio rústico – aunque cada vez más de moda – de Phnom Penh.

Esta idea surgió hace unos siete años, cuando su propietario, Chea Raty, se sintió fascinado por las iguanas que aparecían en la tele. Acabó pidiendo una cría a un comerciante de Poi Pet, en la frontera tailandesa, cerca de donde creció. Tras enamorarse de su mascota, quiso dar a conocer esta especie – que no es autóctona de Camboya – a un público más amplio, por lo que abrió la cafetería como negocio paralelo a su trabajo en el sector de las telecomunicaciones.

Chea descubrió que le resultaba relativamente fácil conseguir más iguanas, serpientes y otros animales exóticos que le proporcionaba su distribuidor en Poi Pet, que los traía a Camboya desde Tailandia. El flujo de bichos no tardó en convertirse en una avalancha. Tarántulas de pelo rosa, tortugas de espuelas africanas, lagartos dragón barbudos, ranas cornudas sudamericanas, escorpiones negros de la selva y otros animales llenaron los tanques de cristal situados en un lateral de la cafetería.

A la colección de pájaros se sumó la presencia de unos loros guacamayos de un cliente que los importó de Tailandia. Y si Chea no planta uno de estos grandes pájaros, o cualquiera de los otros animales del local, en tu mesa en cuanto llegues, siempre podrás coger uno tú mismo.

El «Reptile Café» ha levantado sensación en Phnom Penh, donde hasta ahora la presencia de animales en los restaurantes se limitaba a las cucarachas o a las criaturas del cercano «Zoo Café». Y si llega a tener éxito, quizá Phnom Penh se ponga a la altura de Seúl y Tokio en cuanto a las cafeterías llenas de animales.

Si quiere saber exactamente a qué se debe todo este alboroto, a «Reptile Cafe» en Phnom Penh saliendo de la calle 167, entre las calles 450 y 173.