Las infecciones respiratorias de las vías altas, como la gripe o los catarros, son una de las patologías más comunes durante el invierno, con frecuentes recaídas, lo que supone uno de los principales motivos de consulta y de bajas laborales, con su consecuente gasto empresarial y sanitario.
A la hora de prevenir las infecciones de las vías altas es importante tener en cuenta algunas recomendaciones como: descansar adecuadamente, beber abundantes líquidos, mantener una alimentación equilibrada y rica en vitamina C, practicar deporte, evitar los cambios bruscos de temperatura, entre otras. Además, para apoyar estas acciones de prevención es esencial poder contar también con tratamientos eficaces frente a los diferentes tipos de virus respiratorios, seguros y bien tolerados; ventajas que nos ofrecen los medicamentos homeopáticos.
Otro de los beneficios a resaltar es que reducen la incidencia y gravedad de los procesos gripales en todo tipo de pacientes, lo que es esencialmente interesante en grupos de riesgo como niños, ancianos, y embarazadas. Son recomendables para los más pequeños, gracias a su facilidad de uso. La forma farmacéutica más representativa de los medicamentos homeopáticos son los gránulos y glóbulos, pequeñas bolitas de sabor dulce que facilitan la administración y favorecen la toma, en el caso de los niños, evitando así su rechazo.
Es importante comenzar el tratamiento con medicamentos homeopáticos en el mes de septiembre para evitar la aparición de los primeros síntomas y prolongarlo hasta el mes de marzo, cuando ya ha pasado el invierno. Principalmente, cuando se trata de niños, ya que el inicio del colegio y la guardería hace que estén más expuestos al contagio.
