Belén y Clara de Rent a Garden convierten en el capítulo 4 de Fiestas al aire libre un huerto en un sitio ideal para celebrar una barbacoa andaluza.
El lugar al que las decoradoras han acudido en esta ocasión está en plena sierra del norte sevillano. Se trata de un antiguo molino con una construcción casi árabe en la que el huerto queda muy cerca de la casa.
Es una hacienda que ha sido reconstruida a lo largo de los años por una familia de origen inglés. Belén y Clara buscan inspirarse en la casa, la propia familia y su estilo de vida. Recuperando de esta manera todo lo natural, la vida del campo y la artesanía de la Andalucía profunda.
Eligen un círculo de yoga en medio del huerto como lugar idóneo para celebrar la barbacoa. Para habilitarlo, colocan una serie de alfombras en el suelo y rodean el espacio con almohadones blancos para que los invitados se puedan tumbar y estar cómodos. En el medio, colocan una mesa alargada ataviada con un mantel blanco. En ella ponen una serie de jarroncitos con flores silvestres para dar un toque rural.
Para la iluminación, apuestan por recoger una serie de botes vacíos de mermelada, y con ayuda de un pegamento de barra, pegan retazos de papel de seda de diferentes colores de forma aleatoria. Dentro introducen una vela. Su iluminación refleja los colores del papel, lo que ayuda a crear ambiente. También utilizan velas que cuelgan de los árboles de alrededor y del camino. Para no quedarse con una iluminación tan tenue ponen una tira de bombillas que cruzan el espacio central.
A la hora de dar ambiente, además de la iluminación, la decoración juega un papel importante. Clara y Belén Optan por utilizar objetos de la artesanía profunda andaluza. Entre ellos están los botijos, que ellas mismas pintan, y diferentes productos hechos de mimbre. Enganchan estas artesanías en las ramas de los árboles. Además de la mesa, colocan un carrito del que cuelgan diferentes utensilios de cocina.
La cena la preparan con productos de la tierra, carnes de un ganadero de la zona y con vegetales recogidos en el mismo huerto. De esta manera los invitados disfrutan de una verdadera cena andaluza rodeados de naturaleza en un chillout muy rural.
