En este episodio de Ponte Guapa el maquillador, Eduardo Jiménez, nos enseña a aplicar correctamente el colorete y los polvos.
Hay diferentes tipos de polvos. Los polvos sueltos requieren una base líquida de maquillaje previa, acorde al color de la piel. Aplicando después el polvo matarás los brillos y fijarás el maquillaje sin perder naturalidad. Da ligeros toques incidiendo en los excesos de brillos, sobretodo en la zona T, frente, nariz y barbilla, y debajo de los ojos.
El polvo compacto, por el contrario, se utiliza para pequeños retoques. Los polvos bronceadores, que pueden ser brillantes o mates tienen que aplicarse en forma de tres desde la sien y hasta el mentón pasando por los pómulos. De este modo no se perderán los volúmenes del rostro.
El colorete puede encontrarse en forma líquida, crema o incluso polvos. Los dos primeros aportarán frescura. Más aún si utilizas colores rosas y melocotones. Si tu cara presenta rojeces o imperfecciones, será mejor que apliques colores terrosos.