Celebre un «Día Internacional del Baño» terrorífico con estas cintas

Celebre un «Día Internacional del Baño» terrorífico con estas cintas

Celebre un «Día Internacional del Baño» terrorífico con estas cintas

Si pensamos en las experiencias más relajantes y casi gratuitas, una de las primeras ideas que nos vienen a la cabeza es pasar un largo rato en la bañera. Y si buscabas una excusa para poder disfrutar de un increíble y placentero momento en tu bañera, el Día Internacional del Baño (14 de junio) es el momento oportuno.

Se dice que un 14 de junio, mientras se bañaba, el matemático, científico y erudito griego Arquímedes averiguó que el volumen de un objeto podía medirse con precisión al sumergirlo en agua. Incapaz de contener su emoción, saltó de la bañera y gritó «¡Eureka, Eureka!» mientras corría por las calles de Siracusa, Grecia. Como se desconoce la fecha exacta del nacimiento de Arquímedes, el día elegido para recordarlo es la fecha en la que se cree que saltó de su bañera.

Aunque ese «momento bañera» es quizás el más importante de la historia, el cine de terror ha tenido su cuota de momentos más que memorables dentro de la bañera. No está claro por qué la bañera es una herramienta tan eficaz en las cintas de terror, pero el hecho de que mucha gente asocie el baño con el relax total debe tener algo que ver – recordándonos que el baño nos da una falsa sensación de seguridad…

Con esto en mente, lo que sigue es una lista de los «momentos bañera» más terroríficos que hemos experimentado en las salas de cine:

VINIERON DE DENTRO DE… (1975)

La escena del baño de David Cronenberg fue tan repulsiva y perturbadora en esta película que quedó grabada en la mente de muchos otros cineastas. Esta ópera prima de bajo presupuesto de Cronenberg cuenta como una raza de parásitos repugnantes, fabricados por el hombre, propagan una enfermedad venérea dentro de un exclusivo rascacielos.

En la escena más espectacular de la película, uno de los parásitos se cuela por el desagüe hasta llegar a la bañera donde Barbara Steele está disfrutando de un rato a solas con un buen vaso de vino. Su momento de relajación se echa a perder cuando el bicho se cuela por el desagüe y se dirige a una zona íntima entre sus piernas. Lo que ocurre a continuación está lejos de ser explícito -no vemos nada más que el golpeteo de sus piernas y como se rompe el vaso de vino- pero no hace falta ver nada más para formar una imagen de lo más aterradora en nuestra cabeza.

 

ATRACCIÓN FATAL (1987)

Seguramente sabes que en un principio ATRACCIÓN FATAL iba a acabar de una forma muy distinta, con un desenlace más triste, en el que Alex Forrest (Glen Close) se suicidaba tras no recibir la atención que queria de Dan Gallagher (Michael Douglas), un acto que inculpa a Dan de su asesinato.

Trás unas proyecciones de prueba, el público quería una retribución más gratificante para Alex, así que se rodó esta secuencia a cambio. Como escena de suspense, está montada de una forma magnífica: la Beth (Anne Archer) prepara un baño, desconociendo que Alex ha entrado en la casa y está armado con un cuchillo. Se produce una lucha desesperada entre Dan y Alex, antes de que Beth ponga fin al encuentro con un solo disparo.

 

EL RESPLANDOR (1980)

Las escenas que se producen en los cuartos de baño en esta adaptación de Stephen King son quizás las más perturbadoras. Antes de que Jack desahogue su rabia con su familia, en un momento previo vemos cómo encuentra a una hermosa mujer en la bañera en la habitación número 237. Se acercan el uno al otro, pero cuando se abrazan ella se convierte en una putrefacta bruja, dándonos una imagen inequívoca de la locura que ha empezado a nublar la mente de Jack.

 

DESTINO FINAL (2000)

Lo más «divertido» de la saga Destino Final siempre ha sido la creatividad de las muertes de los personajes que se habían librado de las garras de la muerte. Una de las escenas más desagradables es la muerte repentina, pero orquestada a la perfección, de Tod. El desafortunado adolescente solo está intentando afeitarse cuando el retrete empieza a gotear que desencadena un efecto dominó que le lleva a estrangularse dentro de la bañera. Es una escena tan intensa porque sirve como recordatorio de lo peligrosos que pueden ser los objetos cotidianos si tienes un día de mala suerte.

 

PESADILLA EN ELM STREET (1984)

Este slasher de Wes Craven de 1984 se centra en un demonio que puede asaltar a sus víctimas en sus momentos más vulnerables: sus sueños. En una de las secuencias más impactantes, Craven se decantó por un doble juego de terror e hizo que el demonio de los sueños Freddie Krueger atacara a la heroína Nancy Thompson (Heather Langenkamp) cuando ésta se quedaba tontamente dormida en la bañera.

La escena podría haber sido influenciada por la primera cinta en nuestra lista, sobre todo si nos fijamos en los ángulos de las cámaras y en el ritmo de la acción; de hecho, Craven ya se había inspirado en la escena de la bañera de Cronenberg en su cinta menos conocida, Bendición mortal (1981) en la que una mujer joven (Martha Jensen) es atacada por una serpiente mientras ella se encuentra en la bañera.