Durante siglos, el ser humano ha estado fascinado con volar. En la antigua China, se volaban cometas para investigar el clima. Inventores como Leonardo da Vinci también desarrollaron muchas hipótesis sobre cómo volar. Los planeadores y los globos llevaban al hombre hacia el cielo, pero ninguno de estos inventos nos permitía controlar hacia dónde volábamos. Sin embargo, todo esto cambió cuando los dos hermanos, Orville y Wilbur Wright, lograron hacer volar una máquina que pudieron controlar a lo largo de una distancia de 120 pies el 17 de diciembre de 1903. Desde tal fecha, el mundo de la aviación «saltó por los aires».

Como consecuencia, el DÍA NACIONAL DE LA AVIACIÓN (19 de agosto) fue instaurado en 1939 por Franklin Delano Roosevelt, quien emitió una proclamación presidencial que establecía el aniversario del cumpleaños de Orville Wright como el Día Nacional de la Aviación.

Curiosamente, la aviación y el cine de terror nacieron con tan sólo cinco años de diferencia: los cortometrajes fantásticos de Georges Méliès aparecieron por primera vez en 1898, y los hermanos Wright volaron su histórico avión en Kitty Hawk, Carolina del Norte, en 1903. Y, dada la repentina popularidad de los aviones, estas máquinas voladoras no tardaron en convertirse en el escenario de muchas películas, sobre todo las de catástrofes y de terror, dado que tanta gente sufre un miedo profundo hacia las alturas y a los vuelos. Y lo cierto es que las escenas con aviones siempre han aportado un drama especial a la gran pantalla.

Por lo tanto, con motivo del «Día de la Aviación», lo que sigue es una selección de películas de terror que no deberías ver si tienes intención de volar a algún destino este verano…

THE HORROR AT 37.000 FEET (1973)

En un vuelo comercial de Londres a Los Ángeles, un arquitecto y su mujer trasportan una antigua reliquia británica. Cuando se hallan en mitad del océano, algo despierta en la bodega del avión: un horror antiguo y ancestral que busca venganza, y que va a obligar al pasaje a enfrentarse a él, a 11 mil metros de altitud.

La película está protagonizada por William Shatner que interpreta a un ex-sacerdote alcohólico que lucha con su fe compartiendo la pantalla con varios otros actores de la televisión como Buddy Ebsen («Los nuevos ricos») y Chuck Connors («El hombre del rifle»).

En definitiva, se trata de una mezcla de los géneros del cine de catástrofes y de demonios que puede despertar cierta nostalgia no sólo por una época más sencilla del cine, sino por los viajes en avión antes del 11-S.

 

LA INVASIÓN DE LOS ZOMBIES ATÓMICOS (1980)

Dirigido por Umberto Lenzi, esta película relata cómo un avión expuesto a la radiación aterriza y aparecen zombis armados con cuchillos, pistolas y dientes. Atacan cortando y mordiendo todo en su camino a través del campo italiano.

Los fans de los festines psicotrónicos de gore lo pasarán en grande cuando se abran las puertas del avión de carga y una horda de zombis mutantes, armados con todo tipo de herramientas, se lance a la pista de aterrizaje, llena de víctimas indefensas.

 

THE LANGOLIERS (1995)

¿Qué sería de una lista de películas de terror ambientadas en aviones sin una película de Stephen King? Esta cinta trata de un vuelo nocturno de Los Ángeles a Boston que se desvía al aeropuerto de Bangor debido a que todos los pasajeros que no estaban dormidos desaparecen. Suceden unas cuantas cosas extrañas y, aunque la película resulta algo anticuada, la trama y su intriga hacen que aún resulte interesante para las generaciones futuras. Hay que tener en cuenta que no se trata de una película de Hollywood en sentido estricto, sino de una miniserie que se emitió el 14 y 15 de mayo de 1995 en la cadena ABC.

 

DESTINO FINAL (2000)

Pese a que son pocos los minutos que transcurren a bordo del medio de transporte que nos atañe, no podía faltar en la lista el inicio de una de las sagas de terror más celebradas del siglo gracias a un ingenioso punto de partida que reinterpreta el clásico juego con la muerte.

El inefable James Wong nos cuenta cómo un joven estudiante tiene una premonición al subirse al avión en el que se dispone a ir a París con sus compañeros. Presintiendo que algo grave va a pasar, él y sus amigos desembarcan antes del despegue. Efectivamente, el avión sufre un trágico accidente, y los jóvenes piensan que se han librado de una muerte segura gracias a la premonición de su amigo. Pero el destino no ha sido vencido todavía…

 

VUELO NOCTURNO (1975)

VUELO NOCTURNO supuso el regreso de Wes Craven. Tras algunos fracasos después de Scream 2 a finales de los 90 y principios de los 2000, a los fans les agradó ver a Craven retomar aquello que mejor dominaba: generar miedo y tensión que desafiaba las reglas del cine de terror. En la película, Lisa sube a un avión. Un hombre se sienta a su lado y le dice en voz baja que trabaja para una organización terrorista y que, si no le ayuda, matará a su padre. La película se convierte en una historia clásica de persecuciones pero con un giro distinto: ambos están atrapados en un avión a 35.000 pies de altura.