Un 23 de mayo de 1986 se estrenaba POLTERGEIST II – EL OTRO LADO. Aunque mucha gente sostenga que no es una secuela perfecta tras el éxito veraniego de Tobe Hooper de 1982, la película logró recuperar más del doble de su presupuesto de 19 millones de dólares, y resulta lógico entender por qué se realizó una tercera película en la saga.

La película original de Poltergeist siempre ha ensombrecido sus secuelas y el remake, no sólo en cuanto a su calidad objetiva, sino también por la supuesta «maldición» que rodea a la película original y por los rumores que circulan en torno de la relación conflictiva entre el director Tobe Hooper y el productor Steven Spielberg. De hecho, muchos creen que Spielberg fue quien dirigió gran parte de la película.

Aunque aprovechaba el éxito de los personajes de la primera película, la primera secuela empleó una acertada fórmula para crear otro tipo de terror: un énfasis en un sexto sentido y en la rabia paterna que vimos en EL RESPLANDOR, un líder de un culto religioso que recuerda a Jim Jones y un hechicero indio. A estos ingredientes se une un mensaje muy ochentero: la familia que se une a través del poder del amor puede vencer cualquier mal.

Para celebrar el trigésimo quinto aniversario de la película, lo que sigue es una selección de curiosidades sobre la secuela que no sólo tenía un importantísimo legado que cumplir, sino que además venía cargada de la suposición por parte de muchos de que la saga estaba maldita por todo lo que había pasado desde el rodaje de la primera película…

– Sin que la mayoría del reparto y el equipo lo supieran, varios de los cadáveres que vemos en la pantalla eran esqueletos reales. Al enterarse de esto, el equipo pidió que se realizara un exorcismo en el set para calmar las crecientes tensiones. El exorcismo fue realizado por Will Sampson (el chamán indio en la película), que era un chamán en la vida real. El personal de seguridad del estudio recibió instrucciones de dejar el set sin cerrar y sin vigilancia para que Sampson pudiera volver por la noche para llevar a cabo el exorcismo. Al fin y al cabo, no era la primera vez que se utilizaban restos humanos reales en vez de maniquís. Por ejemplo, se utilizaron esqueletos reales en la escena del cementerio indio en la primera película.

– Sampson falleció apenas un año después del estreno de la película por problemas de corazón.

– La imponente roca monolítica que vemos al principio de la película y a cuya cima llega Sampson es la famosa Spider Rock que se encuentra dentro del Cañón de Chelly en Arizona. En la mitología de los indios navajos esta roca es sagrada y es el hogar de la «Mujer Araña», de ahí el nombre de la roca «Spider Rock» (Roca Araña).

– La actriz Dominique Dunne, la que interpretó a Dana (la hermana de Carol Anne en la primera película) murió poco después de finalizar el film anterior, debido a que su ex novio celoso la estranguló. Es por ese motivo que no salió Dana con su familia en éste film.

– En la película hay una referencia a la película Alguien Voló sobre el Nido del Cuco, el clásico de Milos Forman de 1975; cuando Steve le dice a su mujer que ese indio pudo haber escapado de un manicomio. El actor Will Sampson interpretó a un demente encerrado en un manicomio en aquel film.

– Cuando Carol Anne y su madre están hablando en la bañera sobre una niña llamada Alicia, se refieren claramente a la novela de Lewis Carroll: «Alicia en el País de las Maravillas».

– El actor que hacía de reverendo Kane, Julian Beck, estaba afectado de cáncer de estomago cuando rodaba la película. De ahí su rostro casi cadavérico, lo que vino muy bien al personaje en la película. Murió poco antes de acabar el rodaje del film. Por esta razón en Poltergeist III el actor que interpreta al reverendo Kane es otro.

– El artista surrealista H.R. Giger se encargó de diseñar los efectos especiales. Aunque realizó varios diseños, sólo dos de ellos se incluyeron en la película, y si parpadeas te los perderás. Algunos libros sobre su arte cuentan cómo Giger estaba «muy disgustado» con el modo en que sus diseños fueron trasladados a la película.

– En un principio, la película duraba 131 minutos, pero fue editada para que durase sólo 91 minutos. Algunos opinan que la MGM se precipitó en la producción y exigió los recortes. Por ejemplo, la batalla final con Kane dura sólo dos minutos. Sobre todo Zelda Rubinstein estaba furiosa por ello, ya que le parecía que sus mejores escenas habían sido eliminadas de la versión final.