TRES HISTORIAS PARA NO DORMIR se estrenó el 18 de noviembre de 1986 y es una de las muchas películas para los que crecimos en aquella época que hacen que disfrutemos del terror de los 80. Tiene imaginación y creatividad de sobra. Cuenta con efectos prácticos espectaculares y un gran sentido del humor. Su tono se caracteriza por ofrecer entretenimiento por encima de todo. Estas son todas las cualidades que alcanzaron su máximo esplendor en los años 80. Y a pesar de que TRES HISTORIAS PARA NO DORMIR quizá no represente lo mejor que el terror puede ofrecer, sí que es una buena representación de la mejor y más próspera época que ha conocido el cine de terror.

Siguiendo una línea análoga a la de otras numerosas y exitosas películas de terror antológicas de la época, como EL CLUB DE LOS MONSTRUOS (1981), CREEPSHOW (1982), PESADILLAS (1983) y EN LOS LÍMITES DE LA REALIDAD (1983), la película relata cómo, para adormecer a su sobrino, un tío le cuenta tres retorcidas versiones de cuentos de hadas clásicos en los que intervienen brujas, lobos y asesinos.

Para celebrar el 35 aniversario de la película, lo que sigue es una serie de curiosidades en torno a uno de los clásicos de los 80 del que no se habla lo suficiente hoy en día…..

– En un principio, el segmento de la «Caperucita Roja» iba a ser el primero. Al final, optaron por el segmento «Peter y las brujas», que iba a ser un largometraje. Se rodó una versión mucho más larga, llamada «El bosque negro», la cual se incluyó como contenido extra en la edición del 30º aniversario de esta antología, aunque con una resolución del metraje en bruto.

– Gran parte del primer segmento se rodó en el patio trasero del director Jeffrey Delman. Delman también participa en este segmento como un cadáver colgante.

– La historia que reune los segmentos se basó libremente en «El niño que gritó ¡Lobo!» y la coprotagonista Cathryn DePrume y el director Delman prestan sus voces como locutores del concurso que se emite por televisión en esta historia.

– Jeffrey Delman, Melissa Leo y Kevin Hannon vivían juntos en la casa que sirvió como vivienda de Goldi Lox. La casa se incendió unos años más tarde.

– Varios miembros del reparto se presentaron al día de trabajo con lesiones:
Melissa Leo tuvo que llevar un jersey naranja grueso para disimular que tenía una escayola en el brazo que se había roto antes del rodaje del tercer segmento.
La cojera de Scott Valentine en el primer segmento era real. Había quedado cojo tras ser atropellado por un camión antes del rodaje de su segmento.

– Los policías que aparecen en el tercer segmento son policías reales del Departamento de Policía de Nueva York, y utilizan su propio equipo (sus armas de servicio con balas de fogueo) y sus uniformes (sin los parches). Ninguno de ellos aparece en los créditos y no se les pagó por su participación a causa de la mala gestión de la producción.

– Kevin Hannon basó su interpretación de Papa Baer en el actor William Hickey. Se rapó la cabeza expresamente para este papel.

– Todos los efectos especiales se hicieron en cámara y el monstruo que se ve al final del segmento que une todos las historias se basó en un dibujo realizado por un niño que el director Jeffrey Delman conocía.

– Los efectos especiales eran tan explícitos en el primer segmento que tuvieron que ser atenuados para conseguir la calificación R de la MPAA.

– Y vamos a terminar con un par de curiosidades realmente aleatorias extraídas del comentario de audio de Jeffrey Delman en la edición del 30º aniversario: la cabeza del hombre lobo se fabricó usando un atrezo desechado de Dick Smith de la película STARMAN, EL HOMBRE DE LAS ESTRELLAS, y el cadáver de uno de los novios de «Goldi Lox» fue interpretado por el futuro batería de la banda White Zombie.