Israel como escenario: sus grandes películas

Uno de los segmentos clave de Guerra Mundial Z (World War Z, Marc Forster, 2013) se desarrollaba, narrativamente hablando, en Israel, concretamente en Jerusalén. En la ciudad hebrea se mantenía aislado un reducto de supervivientes del apocalipsis zombie que estaba asolando el mundo. Una coyuntura que ejercía de metáfora, muralla mediante, de la situación en Cisjordania. También, el filme de Forster, uno de los grandes blockbusters, le pese a quien le pese, del siglo XXI, subrayaba la imposibilidad de rodar en Israel hoy en día. Las grandes ciudades del país están selladas y la entrada foránea enormemente limitada.

Israel como escenario de cine es una quimera; también supone adentrarse en una realidad burocrática de complicada resolución. Lo es incluso para la factoría local, que suele aprovechar backgrounds naturales –zonas desérticas, pueblos abandonados— para llevar a cabo sus ficciones. De esta manera, solo a través del cine podemos conocer algunos de los rasgos urbanísticos e idiosincráticos de Israel. O eso, o ver La tumba, la serie de cabecera en SundanceTV donde asistimos a algunos de los axiomas expuestos con anterioridad.

A continuación, les presentamos algunos filmes que se desarrollaron argumentalmente en territorio hebreo.

Éxodo, Otto Preminger, 1960

Las bases de lo que hoy conocemos como Israel aparecen en este denostado filme que sufrió en el rodaje todo tipo de complicaciones, casi todas derivadas de la situación de tensión que medio siglo después sigue campeando en la zona. Incluso Paul Newman tuvo que intermediar para que este film-encargo de Preminger viera la luz. La película adapta la novela homónima de Leon Uris, que narra la disyuntiva del proscrito pueblo hebreo: o terrorismo o concordia a la hora de diseñar el presente de una nación.

El reino de los cielos, Ridley Scott, 2005

Huelga decir que en esta cabecera somos fans acérrimos del director británico. Y más con propuestas como El reino de los cielos, una aventura medieval con mirada contemporánea que pasa la mayor parte de su tiempo en Jerusalén. Nos ubica en la parte final de las cruzadas, en el asedio de las tropas de Saladino a la fortaleza cristiana. Dentro de un reparto descomunal, el actor más destacado lleva el rostro tapado: Edward Norton dando vida al rey Balduino. Por supuesto, les recomendamos el Director’s Cut.

Múnich, Steven Spielberg, 2005

Todo lo comentado en párrafos anteriores tiene cabida en esta obra maestra de Steven Spielberg, que narra la afrenta vengada por la agencia de inteligencia de Israel, el Mossad, tras los asesinatos de varios de sus deportistas en los Juegos Olímpicos de Múnich de 1972. Eric Bana es el gran protagonista de esta historia sobre uno de los grandes conflictos del siglo XX que sigue (y seguirá) perenne en el XXI.

Sand Storm, Elite Zexer, 2016

Cerramos con una obra que sí está rodada en Israel, eso sí, lejos de las grandes urbes, en territorio beduino, en el desierto del Néguev, al sur del país. El filme de Zexer es un relato de emancipación femenina que narra la rebelión de una joven ante la tradición marital imperante. Una mirada contemporánea, valiente y honesta. Sand Storm obtuvo el Gran Premio del Jurado a la mejor película internacional en el Festival de Sundance. También compitió por la Espiga de Oro de la Seminci.

El antepenúltimo mohicano

@eamcinema | Park City, Utah.

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