Un equipo de científicos «hacen hablar» a una momia de hace 3.000 años

Una momia egipcia de hace 3.000 años ha conseguido «hablar» con la ayuda de un grupo de científicos británicos. Esto ha sido posible gracias a la técnica de tomografía computarizada, la impresión 3D y a una laringe electrónica.

Los investigadores de la Universidad de Londres y de York, han podido reproducir con exactitud el habla de la momia que pertenecía a un sacerdote egipcio, un sonido semejante a una vocal.

Los científicos llevan trabajando en este hallazgo desde el 2013; los resultados de esta investigación se han publicado en la revista Scientific Reports.

Nesyamun vivió durante el políticamente volátil reinado del faraón Ramsés XI (c.1099-1069 a.C.) hace más de 3.000 años, trabajando como escribano y sacerdote en el templo estatal de Karnak en Tebas, y su voz era una parte esencial de sus deberes rituales que implicaban tanto actividades habladas como cantadas, recuerda la Universidad de York en una nota de prensa.

Esta institución recuerda que las dimensiones precisas del tracto vocal de un individuo producen un sonido único y si se pueden establecer sus dimensiones los sonidos vocales pueden ser sintetizados usando un tracto vocal impreso en 3D y una laringe electrónica.

Para que esto sea factible, el tejido blando del tracto vocal -constituido por la cavidad oral, nasal, faringe y laringe- debe estar en su mayoría intacto.

Los científicos usaron un escáner con la finalidad de escudriñar la laringe y la garganta de Nesyamun, cuya momia se localiza en el Museo británico de Leeds.

Gracias al método de momificación, una parte estaba intacta, lo que ayudó a los expertos a medir la forma del tracto vocal a partir de imágenes de tomografía computarizada.

Las mediciones ayudaron a crear un tracto vocal impreso en 3D para Nesyamun y así los científicos pudieron usarlo para añadirlo a una laringe artificial, habitualmente empleada en los sistemas de síntesis de voz de hoy en día.

Lograron reproducir un solo sonido, a medio camino de la pronunciación de las vocales en las palabras inglesas ‘bed’ y ‘bad’.

Se trata de «una oportunidad única de escuchar la producción del tracto vocal de alguien que murió hace mucho tiempo en virtud de la preservación de los tejidos blandos y los nuevos desarrollos en tecnología, como escaneo digital, impresión en 3D y el órgano del tracto vocal», explican los autores.

Si bien este enfoque tiene amplias repercusiones en la gestión del patrimonio y la exposición de los museos, «su pertinencia se ajusta exactamente a la creencia fundamental de los antiguos egipcios de que pronunciar el nombre de los muertos es hacer que vuelvan a vivir».

Este descubrimiento «nos permite entrar en contacto directo con el antiguo Egipto escuchando un sonido de un tracto vocal que no se ha oído durante más de 3.000 años, conservado mediante la momificación y ahora restaurado mediante esta nueva técnica», observan sus responsables.

Para John Schofield, uno de los artífices, asegura que ha sido un proyecto muy interesante, el cual ha podido abrir una ventana al pasado y explica que se sienten muy emocionados de poder compartir el sonido de una momia de hace 3.000 años. 

Fuente: EFE