La ola de calor propia de los primeros vestigios del verano no se ha hecho esperar ni un segundo más. Si aquí el calor puede resultar difícil de llevar, en lugares como la India lo están padeciendo más que nadie con temperaturas que rozan los 50 grados. Condiciones que hacen que toda precaución sea poca a la hora de evitar quemaduras, insolaciones o enfermedades, sobre todo entre los más pequeños y los mayores.
Aproximadamente 7000 personas mueren cada año a causa de algún tipo de melanoma relacionado con el cáncer de piel, y cerca de la mitad de los diagnosticados con metástasis de melanoma presentan la llamada mutación BRAF. Recientemente, el Departamento de Ciencias de la Salud de la UCLA (Universidad de California en Los Ángeles) ha emitido un informe que señala la combinación de tres fármacos como una terapia “efectiva” para combatir este tipo de cáncer sin causar efectos colaterales.
El estudio demuestra que la esperanza de vida de los pacientes se ve incrementada y que el avance del cáncer/el crecimiento del tumor se detiene. Los tres medicamentos empleados son dos inhibidores del gen BRAF y un tercero que interviene en el control inmunológico.
El principal autor del reporte publicado en la revista especializada Nature Medicine, es el científico español Antoni Ribas, profesor de la Escuela de Medicina David Geffen: “Usar las tres drogas conjuntamente sensibilizó el sistema autoinmune de los pacientes, aumentando el poder de la inmunoterapia y bloqueando el crecimiento de dos genes –BRAF y MEK– que causan que las células cancerígenas se reproduzcan y crezcan sin control”, ha asegurado.
La investigación constó de varias fases que proporcionaron los datos y resultados pertinentes. En un primer estadio, la combinación de las tres drogas se probó en 15 pacientes con cáncer de piel que y mutación de metástasis BRAF. En 11 de ellos, no solo se observó que los tumores no crecían más y se mantenían estables entre 12 y 27 meses. También redujeron su tamaño.
El siguiente paso incluyó pruebas del tratamiento en 120 personas de 22 centros de salud alrededor del mundo. En este caso, a la mitad se le suministraron los 3 fármacos y a los pacientes restantes se les trató con dos inhibidores y un placebo. Para el primer grupo, los tumores frenaron su crecimiento una media de 16 meses. El grupo placebo veía esta cifra reducida a 10,2 meses.
Parece que ola de calor no viene sola. Le acompaña una ola de tratamientos nuevos, fiables, eficaces y, sobre todo, complementarios o alternativos a otros procedimientos contra diversos tipos de cáncer que pueden resultar agresivos, como la radioterapia o la quimioterapia.
Fuente: EFE
