¿Vampiros verdaderos?: La pareja poliamorosa que acepta sangre de donantes

En principio los vampiros no existen, pero eso no quita que no haya gente que se crea uno tal como Michael O’Shea nos demostró en su película conmovedora, THE TRANSFIGURATION. Su esencia oscura y metafórica atrae a más de uno y claro está: cuando te crees una criatura que básicamente se alimenta de sangre humana – algo que la gente se suele molestar si le intentas quitar – tienes que recurrir a formas alternativas para integrarse con el mundo lo mejor que puedan.

En el reality, «Extreme Love», un matrimonio de vampiros ha revelado cómo se alimentan de la sangre de una «amiga donante» una vez al mes para calmar su sed.

Logan y Daley South consiguen la sangre de su amiga Ilona pinchándose el dedo con el mismo dispositivo que usan los diabéticos para sacar «la cantidad justa». La pareja afirma que, como vampiros, necesitan recibir energía humana en forma de sangre o energía psíquica o energía sexual para mantenerse sanos.

Daley dice que su motivo detrás del ritual mensual no es «sexual»; en cambio, cuándo se siente abatida y «necesita alimentarse», llama a su amiga Ilona. «No me siento sexualmente excitada cuando bebo sangre», dice Daley, quien se ha operado las orejas para tenerlas en punta como un murciélago. «Ni siquiera me gusta como sabe la sangre, me parece un inconveniente tener que beberla de forma regular», explica.

Sin embargo para su marido, Logan, sí que hay un fuerte componente sexual. «Al fin y al cabo es alguien que está dispuesto a compartir algo muy íntimo contigo».

La pareja poliamorosa ha compartido una relación abierta desde que se conocieron hace siete años y se casaron en 2017 en una ceremonia de 120,000 dólares donde había un pastel de Drácula y bailarines de barra.

Se llaman a sí mismos el «rey y la reina» de la Corte de Vampiros de Austin, llevan colmillos, evitan la luz solar y duermen durante el día.

Está de más decir que los donantes son difíciles de conseguir y Logan y Daley siempre conocen a sus donantes de sangre antes y sea cual fuere la naturaleza del donante, la relación vampírica siempre es consensuada. Se tiene un cuidado extremo por los donantes y se aseguran de que siempre estén dispuestos. Y luego, los donantes pasan por exámenes en centros de salud cada seis meses para evitar infecciones contagiosas.

La primera vez que Daley bebió sangre fue cuando estaba en una clase de inglés en el colegio.

«En realidad, fue una experiencia muy intensa para mí» dijo, y explicó cómo empezó a sentir una «sed intensa» que jamás había sentido antes.

«Fui corriendo hasta la primera fuente de agua que había pero al beber seguía con muchísima sed. Entonces se encontró con un amigo que le estaba ayudando con «el despertar», sacó una aguja y le dio sangre.

Mientras tanto, Logan, que sale al sol solo una hora a la semana bebió sangre por primera vez con 15 años, en una experiencia que considera «empoderadora». «Agudizó todos mis sentidos y sensaciones. Todo un subidón».

Según él: «Ser un vampiro no es algo que puedas elegir. Naces así. Es algo que forma parte de ti.

Quizás ahora que la comunidad vampira se está abriendo a personas extrañas, los científicos sean capaces de explorar los muchos interrogantes y ofrecer algunas respuestas….