La brujería en España es una parte esencial de nuestra cultura. Por eso, muchas aldeas y pueblos se han visto envueltos en leyendas de misterio relacionadas con el tema. Esto ha dado lugar también a la producción de numerosas películas de brujería ambientadas en estos lugares.
Por todas partes se cuentan historias de brujas, magia y hechicería. De hecho, los pueblos encantados de nuestro país son además un gran atractivo turístico para los aficionados al tema. En este artículo, exploramos algunos de los lugares más mágicos y hechizados de España.
Historia, folclore y brujería en España
¿Quién no ha oído alguna vez hablar de las meigas? ¿Y de la Santa Compaña? El acervo popular español está plagado de este tipo de historias. Muchas de ellas tuvieron lugar en escenarios concretos, lugares mágicos como Zugarramurdi, Soportújar o Llanes. Vamos a descubrir algunos de los más importantes y las leyendas que han protagonizado.
Zugarramurdi
Es probable que la historia de las brujas de Zugarramurdi sea una de las más conocidas. Y es que en el siglo XVII, en este pequeño pueblo de la Comunidad Foral de Navarra, decenas de personas fueron acusadas de brujería. Seis de ellas, además, fueron condenadas a morir en la hoguera.
A pesar de que los testimonios de los vecinos se dieron por ciertos, algunos inquisidores dudaron de la veracidad de los acontecimientos después del proceso. Fuera como fuese, lo cierto es que marcaron la historia de Zugarramurdi y, desde entonces y por mucho tiempo, la sombra de la brujería planeó sobre el pueblo.
Hoy en día la leyenda supone un gran atractivo turístico. De hecho, las personas que llegan hasta allí pueden visitar la cueva de las brujas, donde supuestamente ocurrían los aquelarres.
Soportújar
El pueblo granadino de Soportújar es famoso por haber sido un pueblo de brujas. Durante el reinado de Felipe II fue repoblado con gentes de Galicia, lo que hizo que empezaran a correr este tipo de rumores. Muchos vecinos aseguraban que en los bosques cercanos tenían lugar aquelarres y otros rituales.
Todo el pueblo está lleno de enclaves fascinantes relacionados con el misterio. Las personas que hasta allí se acerquen podrán visitar, entre otros, la cueva del Ojo de la Bruja y la cabeza gigante de Baba Yaga. También es muy especial la calle de Zanjilla, que ostenta el título de la más mágica y estrecha de España.
Llanes
Llanes es el origen de una de las leyendas de brujería más famosas de España: se trata de la bruja Ana María García, conocida como la llobera. Al parecer, Ana era la última de siete hermanos nacidos en Posada de Llanes. El sufrimiento que arrastró toda su vida fue determinante para que se pusiera al servicio de Catalina González, una famosa hechicera de la zona.
Con Catalina, Ana aprendió a realizar embrujos y también a convocar a los lobos, que la obedecían. Esto le otorgó un gran poder, pues los ganaderos deseaban que controlara a estos animales que atacaban a las vacas y las ovejas frecuentemente.
El amor por un vaquero que trabajaba en Toledo la condujo hasta esa ciudad en el año 1648. Allí fue acusada de brujería. Sin embargo, ante la falta de pruebas, fue puesta en libertad. Hoy en día, Barros (pueblo del mismo concejo) celebra una fiesta en honor a estas mujeres.
Mondoñedo
Es muy común oír hablar de las meigas y, aunque nadie (o casi nadie) las ha visto, lo cierto es que haberlas haylas. Sin embargo, la historia de Mondoñedo no nos habla de una bruja, sino de un brujo que, ciego de amor, decidió destruir toda una ciudad y enterrar para siempre el alma de su amada.
Al parecer, según cuenta la leyenda, hace mucho tiempo gobernaba en Bría un rey llamado Cintolo, que tenía una hija hermosísima llamada Manfada. De sus amores se antojó un brujo de la zona. Sin embargo, este tuvo que enfrentarse a otros pretendientes, y perdió las disputas.
Fruto del desamor, el malvado brujo decidió destruir Bría y reducirlo todo a cenizas. Supuestamente, el castillo del rey también quedó sepultado. Se dice que el alma de Manfada todavía vaga bajo los escombros, en una de las mayores cuevas de Galicia: la cueva del Rey Cintolo.
Piedrafita del Jaca
Piedrafita del Jaca es un pequeño pueblo situado en Huesca, en el valle de Tena. Sus habitantes se conocen por el sobrenombre de brujos, quizás porque es una zona plagada de emblemáticos lugares relacionados con la brujería.
De hecho, tal y como ha llegado hasta nuestros días, en el bosque del Betato tenían lugar grandes aquelarres. Se trata de un hayedo en el que las brujas aprendían hechicería y realizaban sus rituales.
Trasmoz
¿Sabías que Trasmoz es un pueblo excomulgado? Su historia de brujería se remonta muchos años atrás. Dicen que el castillo fue edificado en una sola noche por el poderoso mago Mutamin, que pactó con el diablo para conseguirlo.
Además, según cuentan las leyendas populares, en Trasmoz habitaron numerosas brujas. La última de la que se tiene constancia fue la Tía Gasca. Por si fuera poco, todos los años eligen a la bruja del año entre aquellas personas que más hayan promocionado la historia y la tradición cultural del pueblo.
Trasmoz es también un pueblo maldito. En el siglo XIII la Iglesia excomulgó a la aldea y a todos sus habitantes, aunque la historia tuvo más que ver con un problema de gestión de los recursos del monte. Sea como fuere, lo cierto es que esta excomunión permanece vigente.
Cernégula
Supuestamente, en Cernégula se reunieron durante años las brujas de toda la zona. Hasta allí acudían hechiceras de Castilla, Cantabria y Navarra para aprender nuevos encantamientos y realizar aquelarres. De hecho, la Inquisición llegó a mandar al inquisidor de Burgos con el objetivo de capturarlas.
Los pueblos encantados de nuestro país son verdaderamente increíbles. Las historias de brujería en España son una parte más de nuestra cultura. Además, como hemos visto, podemos visitar muchos lugares en los que estas leyendas están todavía muy vivas.
