80 años de curiosidades de ‘El hombre lobo’

El clásico de la Universal, El Hombre Lobo ha estado «merodeando, matando y aterrorizando al campo con la sed de sangre de una bestia salvaje» durante los últimos ochenta años desde que se estrenó el 12 de diciembre de 1941.

Aunque la película menos conocida de Universal Picture, EL LOBO HUMANO, de 1935, se puede calificar como la primera película dedicada al fenómeno de los hombres lobo dentro de su serie de monstruos, las películas de los monstruos más infames del cine comenzaron incluso antes, con EL JOROBADO DE NOTRE DAME, de 1923. Tras el estreno de una serie de clásicos, EL HOMBRE LOBO (dirigida por George Waggner y escrita por Curt Siodmak) llegó durante la tercera oleada de los monstruos de la Universal y, a pesar de las preocupaciones del estudio sobre las ganas del público por el cine de terror tras el ataque de Pearl Harbor, la cinta se convirtió en una de las películas más taquilleras de 1942.

Para celebrar el octogésimo aniversario de la película, lo que sigue es una selección de curiosidades sobre la que quizá sea la versión más célebre y definitiva de lo que los amantes del cine conocen ahora como los hombres lobo.

– Muchos de los mitos actuales sobre los hombres lobo provienen de esta película, como por ejemplo que una persona se convierte en hombre lobo por un mordisco, que la única forma de matar a un hombre lobo es con una bala de plata y que los hombres lobo y sus víctimas llevan marcas de pentagramas. Algunos de ellos proceden de su película predecesora, El lobo humano (1935), que tampoco tuvo mucho éxito en su moment, y otros son conceptos originales que fueron ideados por el guionista Curt Siodmak. El folclore actual sobre los hombres lobo es muy variado ahora; en algunos casos, una persona se convertía en hombre lobo al recibir una maldición o al hacer un pacto con el diablo, podía convertirse en cualquier momento y era mortal y podía ser matada por medios convencionales. En las películas posteriores fue añadido el hecho de que los hombres lobo fueran inmortales, una vez más, un idea inventada por Hollywood, y en cierto modo una excusa para poder seguir recuperando el personaje una y otra vez en las secuelas.

– Según el documental que se incluye en una colección reciente en DVD de El hombre lobo, las experiencias del escritor Curt Siodmak en la Alemania nazi marcaron el guión de esta película. Siodmak llevaba una vida normal en Alemania, pero cuando los nazis tomaron el control, su vida se convirtió en un caos y él mismo huyó, de la misma manera que Larry Talbot vive un caos cuando se convierte en hombre lobo. Además, el propio hombre lobo puede verse como una metáfora de los nazis: un hombre bueno que se transforma en un feroz animal asesino que sabe quién será su próxima víctima cuando ve que tienen el símbolo de un pentagrama (es decir, una estrella).

– El guión original de Siodmak dejaba en la ambigüedad si Lawrence Talbot se transformaba en hombre lobo de verdad o si la transformación era tan solo una cosa de su imaginación. El Hombre Lobo nunca llegó a aparecer en la pantalla. Al final, el estudio decidió que una transformación literal sería más atractiva para el público y, por tanto, más rentable. Como consecuencia, se modificó el guión.

– El «lobo» con el que lucha Larry Talbot era en realidad el propio pastor alemán de Lon Chaney Jr.

– En un principio, Universal tenía previsto hacer el proyecto con su superestrella del cine de terror, Boris Karloff. Por otra parte, Bela Lugosi hizo una campaña activa para conseguir el papel principal y acabó interpretando otro papel secundario de menor importancia.

– Esta película se trata de la primera de de las cinco interpretaciones de Lon Chaney Jr. como el Hombre Lobo para la Universal. Del canon clásico de monstruos de la Universal, Chaney fue el único actor que interpretó al mismo personaje en cada una de las películas clásicas del estudio y en sus secuelas.

– Jack P. Pierce logró realizar el característico maquillaje del Hombre Lobo ante todo con la ayuda de una nariz de goma y pelo de yak que se quemaba con unas planchase de pelo y se pegaba a la cara, el brazo y las piernas de Lon Chaney Jr. con una solución adhesiva. Se dice que se necesitaron seis horas para aplicar todo el maquillaje y otras tres para quitarlo.

– En una escena, Evelyn Ankers tuvo que desmayarse y caer al suelo cubierto de niebla, pero el vapor que se usaban para la niebla resultaba tan potente que se desmayó de verdad. Ni el director ni el equipo, que estaban trabajando en otro aspecto de la escena, se percataron de ello hasta que un técnico del estudio se puso a desmontar el set.