Mira quién habla: Los momentos que nos hicieron morir de risa

Biberones, pañales, polvos de talco y… ¿una dicción casi perfecta? Con motivo del maratón de Mira quién habla que hemos preparado para ti en Canal Hollywood el próximo sábado 24 de febrero a partir de las 11:00, hemos recopilado los mejores momentos de la mítica saga de los bebés parlanchines. No vas a poder dejar de alucinar y reír con uno de los legados más desternillantes que nos dejaron los noventa. Si tenías pensado tener hijos, quizá esta saga es lo primero que deberías ver con tu pareja. Créenos: ¡Todo un legado de sabiduría! ¿Preparado?

  1. Taxi Driver, o casi

Una Mollie embarazadísima empieza a notar que el parto es inminente, por lo que después de perder un taxi, es John Travolta el encargado de llevarla al hospital en el suyo. Chico conoce chica. Con bebé que habla. Lo habitual, vamos. Como si de una carrera de obstáculos se tratase, todo lo cómico que pueda ocurrir ocurre (¡cómo no!) y el que fuera Tony Manero se muestra como el mejor posicionado para ayudar al personaje de Kirstie Allie a cuidar a los niños: “Maldito inútil, mi hijo nacerá con una lesión cerebral por su culpa”.

  1. El chiste de la bombilla

Avanzada ya Mira quién habla, Mickey juega con sus amigos en un parque de la ciudad e intenta impresionar a sus amigos con un chiste, como si fueran colegas bebiendo en un bar: “¿Cuántos bebés se necesitan para cambiar una bombilla?” Se hace el silencio. Mickey sigue: “¿Qué es una bombilla?”. Vaya, era posible hacer ese chiste sin caer en ningún tópico. Las risas de los demás niños rematan una escena genial que se cierra con otro de ellos diciendo que no entiende nada. La vida misma, vaya.

  1. “Espero no tener como las cejas como él”

En la segunda parte de la trilogía, Mira quién habla también, la trama principal gira en torno a la habilidad de la pequeñita Julie para poder expresarse con la misma soltura que su hermano. En una de las primeras escenas la niña observa las cejas del personaje de Elias Koteas: “¿Qué les pasa a esas cejas? Los ojos los comprendo. Las bocas también. Pero, ¿esas cejas? Papá no las tiene”. No podemos ni imaginar qué hubiera pasado con Martin Scorsese de por medio.

  1. Popó y pipí

En Mira quién habla también hay sitio para lo escatológico. Como en toda comedia que se precie, claro. Las necesidades de un niño siempre son un quebradero de cabeza para cualquier padre, pero la escena en la que el pequeño Mickey (Bruce Willis en la versión original) es testigo de cómo sus padres le enseñan a usar el orinal es desternillante. Eufemismos y baile mediante: “Cambiarle el agua al canario, visitar al señor Roca, ¿qué quieres que diga?”. Ay, si pudiéramos oír lo que piensan nuestros peques ante semejantes ridículos…

  1. La canción de Navidad

La tercera entrega de la saga, Mira quién habla ahora, es la que habla sobre dejar atrás la niñez y empezar a tener problemas serios, por lo que uno de los puntos centrales es la pérdida de la inocencia. Deprimido después de descubrir que no existe Papá Noel (¡ups!), el pequeño Mickey ve cómo se abre la puerta de su habitación y su padre entra poco a poco con una radio portátil. Lo que sigue a continuación es un auténtico ejercicio de comedia clásica en la que los dos padres y la pequeña Julie cantan y bailan a ritmo de un villancico ridículo que podrían firmar los mismísimos minions. Incrédulo todavía, las explicaciones de los padres para justificar todo el mito de la Navidad es, sin duda, el mejor momento de Mira quién habla ahora.

La estrambótica saga Mira quién habla vivirá para siempre en nuestros corazones y, quién sabe, quizá nos acordemos de ella si nos toca criar a nuestros vástagos algún día. Lejos o no de ese momento, aprovecha para refrescar la memoria y partirte de risa con el maratón que hemos preparado para ti en Canal Hollywood. Recuerda, a partir de las 11:00 del sábado 24, ¡empieza el finde como toca! Y plantéate bien tu futura paternidad…