‘Pueblos para comérselos’: Cómo conquistar al espectador a través de la vista y el gusto

Dónde: En Canal Cocina, todos los jueves y viernes, a las 20.30

Por Federico Marín Bellón

Periodista, crítico de cine y televisión y jefe de sección de TV en ABC durante más de 20 años.

Hace unos días hablábamos del estreno de ‘Comer en carretera’, que ya lleva un mes recorriendo España y dando pistas sobre los mejores sitios para parar y reponer fuerzas. Pero una cosa es hacer un alto en el camino y otra elegir un destino. Desde el 1 de junio, el espectador de Canal Cocina puede descubrir también algunos de los mejores lugares para detenerse un poco más y terminar chupándose los dedos. La guía es completa, del desayuno a la cena, sin descuidar nunca los placeres del espíritu.

‘Pueblos para comérselos’ propone diez escapadas culturales y gastronómicas que tienen algo en común: visitamos pueblos que nos entran por los ojos y nos conquistan por el estómago, una combinación imbatible. Todos los jueves y viernes del mes de junio toca descubrir algunos de los lugares más bonitos del mundo, no solo de España, en este programa de producción propia que Canal Cocina sirve con su habitual eficacia.

Las sesiones, 2012

Aunque a primera vista se podría tratar de una película sobre «discapacidad», el filme de Ben Lewin es mucho más que eso. Esta propuesta, una de las grandes películas independientes de lo que llevamos de siglo, narra la relación entre un periodista tetrapléjico –John Hawkes—, que tristemente para él conserva su virginidad, y una terapeuta sexual (Helen Hunt). Una bonita fábula sobre el respeto que pasó desapercibida pese a su enorme honestidad y ternura.

Esta vez el narrador (increíble su voz, por cierto) no aparece en pantalla. Son los propios vecinos, hosteleros y comerciantes de cada lugar quienes ejercen de guías y nos enseñan qué debemos tomar en cada lugar y dónde podemos disfrutar de sus maravillosas vistas, porque una cosa que comparten estos municipios es su fotogenia. De paso, se puede cazar al vuelo alguna de esas recetas que atraviesan generaciones sin contaminarse del estrés de la ciudad.

Hervás, primer destino, es una perfecta muestra. Es “un trocito del norte de España en el sur”, al otro lado del valle del Jerte. Entre sus calles sobresale su barrio judío, que data del siglo XIV y proporciona al pueblo una gastronomía única, por la mezcla de culturas y tradiciones. Si el espectador se convierte en viajero, que no deje de probar el nuédago, un dulce único que se reparte gratis en la fiesta de Los Conversos. El municipio cacereño destaca también por tener la calle más estrecha de España, de solo 52 centímetros de anchura, y por los cerdos de sus dehesas, que enriquecen sus platos y casi piden a gritos ser adoptados. 

En Montefrío, que destaca por sus ancestrales riquezas arqueológicas, presumen de tener las mejores vistas del mundo. El aceite y el queso condensan el sabor de su sierra, en la comarca del poniente, en un pueblo que además alberga la única iglesia circular de nuestro país.

Después de estas dos primeras paradas, ‘Pueblos para comérselos’ nos enseñará las maravillas de Olite (Navarra), Zahara de la Sierra (Cádiz), Lerma (Burgos), Casares (Málaga), Valderrobres (Teruel), Alcalá del Júcar (Albacete), Luarca (Asturias) y Guetaria (Guipúzcoa).

Más en el blog: Las esenciales de Ingrid Bergman