Muere Stephen Hawking a los 76 años

Esta madrugada el astrofísico más famoso de la Historia, Stephen Hawking, ha fallecido a los 76 años en su casa de Cambridge. 

El genio de la astrofísica padecía ELA desde los 21 años, convirtiéndose en unas de las personas más longevas con esta enfermedad degenerativa. Eso no le impidió llegar a ser el mayor astrofísico de la Historia con sus teorías sobre la creación del universo, los agujeros negros y sus estudios sobre el «Tiempo».

Stephen William Hawking nació el 8 de enero de 1942 en Oxford. Desde pequeño se vio llamado por el mundo de la ciencia y por entender cómo funcionan las cosas. Este interés y sus dotes intelectuales le abrieron las puertas de Oxford (dónde estudió Física) y de Cambridge (licenciado en Cosmología).
Cuando se encontraba en su primer año de doctorado los problemas físicos comenzaron, perdiendo el control por momentos de sus extremidades. Tras varias pruebas se le diagnosticó ELA y le pronosticaron dos años de vida.

En lo personal, se casó con Jane Wilde con la que tuvo tres hijos. La fuerza y dedicación de su mujer fue lo que le devolvió las ganas de seguir con su doctorado y sus investigaciones. Con 28 años se convirtió en uno de los astrofísicos más brillantes de su generación por sus teorías sobre los agujeros negros y el origen del universo.

Desde que sufrió una neumonía en 1985, por la que tuvo que someterse a una traqueotomía, se comunicaba a través de un sintetizador de voz. Este fue evolucionando hasta un potente ordenador que tan sólo con el movimiento de una de sus mejillas y el parpadeo de su ojo lograba formar palabras y comunicarse. Su deterioro aumentaba por momentos y tuvo que pedir ayuda a la compañía Intel para que adaptara su forma de comunicarse a su nula movilidad.

Desde siempre sus teorías estuvieron rodeadas de polémicas al tocar un tema como la Iglesia. Hawking aseguraba que no existía Dios ni que creó el universo, sino que éste pudo originarse espontáneamente de una singularidad, de un punto de densidad infinita que pudo no haber provenido de un universo previo. Según sus palabras «preguntar qué ocurrió antes del Big Bang es cómo preguntar qué hay más al sur del Polo Sur».

Todas estas teorías fueron plasmadas en ensayos, charlas, conferencias y libros. El más conocido, «Breve historia del tiempo, del Big Bang a los agujeros negros» ha vendido más de 10 millones de copias en todo el mundo y es un referente en el estudio de la astrofísica.

Hace apenas cuatro años volvió a primera línea por un artículo defendiendo que los agujeros negros no existían de acuerdo con cómo se habían entendido hasta el momento. Según él, la energía no moría en un agujero negro, sino que en un tiempo indeterminado escaparía de él.

Personaje público y querido se le ha visto en charlas con Bill Clinton, Barack Obama, el Papa, la Reina de Inglaterra o Bill Gates entre otros. Además nunca le ha importado la opinión pública de su enfermedad, incluso se le ha visto bromear al respecto en cameos en series como The Big Bang Theory. Los que le conocieron siempre destacaron de él su gran sentido del humor.

Durante todos su vida a recibido las mas altas condecoraciones y premios como Medalla Hughes, Premio Adams, Premio Wolf o Premio Príncipe de Asturias de la Concordia entre decenas de ellos. Además fue elegido miembro de la Real Sociedad de Londres y Comendador de la Orden del Imperio Británico.

Con su muerte se va la persona que cambió la imagen del Universo a toda una generación de científicos y de la población, alguien con una mente privilegiada que ni con sus problemas físicos pudo frenar el seguir investigando y dando forma a sus conocimientos en astrofísica.