Para entender el origen de la palabra Madrid, debemos adentrarnos en los orígenes de la ciudad en sí misma.
Cerca de las orillas del famoso río Manzanares se han encontrado numerosos objetos y restos arqueológicos, lo que apunta a que la ciudad de Madrid podría remontarse a tiempos prehistóricos.
Hay diferentes teorías sobre el origen de la palabra. Quizá, de todas ellas, la teoría más aceptada sugiere que deriva de la lengua romance, Matrich, en el sentido de manantial.
Una de las tesis apunta a que el nombre de Madrid se remonta a la época cuando los romanos ocupaban Madrid en el siglo II a.C. Esta zona fue llamada Matriz por los romanos, por la existencia de un manantial que había cerca de los caños viejos en la actual calle de Segovia. A su vez, los visigodos llevaron Matrix al romance y a este lugar lo llamaron Matrich.
En su momento, los musulmanes adaptaron la palabra Matrich a su fonética, y la pronunciarían como «Machrit», escrito Mayrit. Esta es la hipótesis más aceptada. Del Mayrit árabe pasamos a Maydrit, Madrit y finalmente: Madrid.
Otra de las teorías indica que el nombre original de Madrid era en realidad Ursaria (palabra que deriva del latín ursus, que significa “oso) ya que habitaban muchos de estos animales en los bosques próximos a la ciudad. También en estos bosques había muchos madroños que hoy en día son el emblema de la ciudad. En esta teoría lo que no queda claro es cómo derivó la palabra Ursaria en Madrid.
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