La Grecia Clásica es el lugar de nacimiento de la democracia. Más concretamente tiene lugar en la ciudad de Atenas, donde se encuentra el verdadero origen de la democracia, como un sistema apoyado por las diferentes clases sociales para expulsar a los tiranos.
Que la democracia naciera en Grecia en torno al siglo VI a. C. no es casualidad. Los griegos llevaban filosofando siglos, desde la aparición de la escuela de Mileto, y habían llegado a un concepto igualitario del hombre. Además, los sofistas, un grupo de autores asentados principalmente en la polis ateniense, defendían que la ley no podía tener origen divino ni basarse en la autoridad de una o de varias personas.
Las primeras elecciones en democracia
Eso sí, en las primeras elecciones democráticas de Atenas no participaban ni las mujeres, ni los esclavos ni los metecos —habitantes de origen extranjero—; solo hombres cabeza de familia atenienses. Con todo, el sistema satisfizo bastante a los ciudadanos, y aupó a esta polis a la posición dominante en Grecia, especialmente bajo el mandato de Pericles.
Fue un tiempo de esplendor artístico, filosófico y militar, que desgraciadamente desembocó en el Gobierno de los Treinta Tiranos cuando Atenas fue derrotada en la Guerra del Peloponeso. La democracia también sufrió críticas por parte de los filósofos de la época como Sócrates, Platón o Aristóteles. Críticas que, paradójicamente, pudieron desarrollar gracias al ambiente democrático que se vivió en Atenas.
