El tren del armisticio

Los trenes fueron fundamentales para la movilización de tropas en la I Guerra Mundial, pero también vieron el final de la guerra. 

El tren que vio la firma del armisticio que terminó con la I Guerra Mundial fue el tren del mariscal Foch. Todo sucedió un 11 de noviembre de 1918 a las 5 horas y 12 minutos de la mañana. Una guerra que llegó a su fin tras 1560 días de la peor contienda hasta el momento. Tras el armisticio, estalló el júbilo.

La elección de un vagón para la firma del armisticio se justifica por la voluntad del mariscal Foch de terminar con la guerra en un lugar discreto.

Actualmente se ubica en un museo conmemorativo del armisticio en Compiegne, donde los visitantes pueden observar una réplica del vagón, adornado con banderas francesas y una exposición de objetos de las Guerras Mundiales. El vagón original –el número 2.419 D de la Société des Wagons-Lits-, se destruyó en un incendio en el bosque de Turingia.

Fuente: El País