¿Sabías que en la época victoriana muchas mujeres usaban los piercings para estilizar su pecho? Este es solo uno de los usos que han tenido estas joyas, y es que su origen se encuentra en las sociedades tribales más antiguas. Vamos a ver algunos datos de interés.
La historia del piercing
En la actualidad, el piercing es simplemente un accesorio más de moda. Sin embargo, en sus inicios, esto no era para nada así. Los primeros que empezaron a usar las perforaciones corporales lo hacían como ritual de iniciación a la vida adulta.
Ser capaz de soportar el dolor y dejar constancia de ello con un objeto visible es algo que se sabe que hicieron varias culturas antiguas. Pero, con el paso del tiempo, a estos complementos se les encontraron otros usos.
Dice la leyenda que el príncipe Alberto de Inglaterra tenía uno en los genitales para adaptarlos a los estrechos pantalones militares de la época. Lo cierto es que hay certeza de que fueron bastante populares en la Europa de finales del XIX y principios del XX.
Incluso después de la II Guerra Mundial, los piercings en labios y pezones eran muy frecuentes en Alemania.
Aunque fueron desapareciendo, nuevas subculturas como el punk los devolvieron a la actualidad en los años 70 del pasado siglo. Así hasta nuestros días, momento en el que las perforaciones son algo simplemente estético.
