El primer ordenador

El primer ordenador, siendo estrictos con los que hoy consideramos como ordenador, fue el ENIAC, lanzado en 1946. Pero este primer ordenador tiene una serie de antecedentes que no hay que dejar de lado y que son de suma importancia.

La aparición del ordenador

Esta historia comienza con un nombre clave: Charles Baggage. Si no es el padre de los ordenadores modernos, al menos sí que fue su profeta. Sus ideas, que no pasaron en muchos casos del boceto, anticiparon lo que hoy pueden hacer los ordenadores. Y lo hizo en pleno siglo XIX, en un intento de crear un dispositivo mecánico que sustituyera a los contables humanos encargados de realizar complejas operaciones matemáticas.

Charles Baggage dejó muchos planos y diseños. Algunos de ellos se han construido más tarde, y se exponen en museos como el de ciencias de Londres… Pero él no llegó a producir personalmente ninguna máquina operativa, que se sepa.

Más tarde, durante la Segunda Guerra Mundial, Alan Turing crearía el primer ordenador digital, que se encargó de descifrar los códigos secretos de la inteligencia de Hitler que se generaban con la máquina Enigma.

A partir de la máquina de Turing se crearon diferentes modelos, pero el único que hoy puede ser reconocido como el primer ordenador es el ENIAC. Un gigante de 30 toneladas que ocupaba 167 metros cuadrados en la Universidad de Pensilvania.

imagen