El baile del siglo de Carlos Beistegui

La noche del 3 de septiembre de 1951 Venecia recuperó su antiguo esplendor en una de las fiestas más deslumbrantes que se recuerdan: le bal du siècle, el baile del siglo. El artífice de la primera gran celebración de la jet set internacional tras el fin de la Segunda Guerra Mundial fue el magnate mexicano de ascendencia vasca Carlos Beistegui, un gran amante del arte, el lujo y la cultura.

Beistegui se propuso recrear la sofisticación de la Venecia del siglo XVIII en un baile de máscaras en el imponente Palazzo Labia, que había adquirido dos años antes. Invitó con seis meses de antelación a centenares de personalidades, desde el Aga Kahn III a multimillonarias como Barbara Hutton, pasando por artistas como Dalí y estrellas de Hollywood de la talla de Orson Welles. A todos les concedió tiempo de sobra para que hicieran volar la imaginación en el diseño y confección de sus disfraces.

El Herald Tribune publicó la lista de los 1.500 invitados, lo que sonrojó a más de uno que se había jactado de haber recibido una invitación cuando en realidad no era así.

La Venecia de Canaletto

Ese día, el Gran Canal recuperó el bullicio y el color de las vedute de Canaletto con decenas de góndolas engalanadas que conducían al palacio a sus ilustres ocupantes. Una multitud agolpada a lo largo del Gran Canal y los alrededores celebraba entre vítores y oes de admiración la llegada de una cascada de celebridades enfundadas en atuendos de fantasía. Seda, plumas, coronas de perlas y piedras preciosas, vestidos exclusivos de diseñadores como Christian Dior, Pierre Cardin, Cristóbal Balenciaga… La atmósfera de opulencia de la fiesta en un escenario de ensueño invitaba a evocar  el refinamiento de la alta sociedad del siglo anterior y a dejar atrás la barbarie de las dos guerras mundiales que habían asolado Europa.

El día del baile, Beistegui, ansioso por que todo saliera a la perfección, se refugió en una suite del Grand Hotel para evitarse los nervios por los retoques de última hora. Su irrupción en la fiesta fue espectacular: el traje y el maquillaje tras los que se ocultaba lo hicieron casi irreconocible para los asistentes.

La actriz Alicia Borrachero nos detalla los pormenores de aquella magna celebración propia de otra época.

BEISTEGUI-ALICIA BORRACHERO from Chello Multicanal on Vimeo.