¿De dónde viene el Día de la Madre?

La celebración del Día de la Madre es una de las fechas más señaladas por todos en el calendario año tras año. “Madre no hay más que una”, y es la oportunidad perfecta para ensalzar y premiar todo el cariño y sacrificio que ofrecen a los hijos cada día, durante todos los días del resto de sus vidas. Pero, ¿de dónde procede la celebración de esta festividad?

Las primeras celebraciones del Día de la Madre se remontan a la antigua Grecia, cumpliendo su papel de cultura seminal que ha servido de base a la civilización occidental. En este época, sus contemporáneos rendían honores a Rea, hermana y esposa de Crono, y madre de Zeus, Poseidón y Hades. Sin embargo, y según Homero, Rea simbolizaba la madre de los dioses y no una madre universal, como podría serlo la diosa Cibeles.

Precisamente, fue la divinidad de Cibeles a quien honraron los romanos que, a su vez, adquirieron la costumbre de los griegos. Estos, nombraron la conmemoración del día como la Hilaria y la dataron el 15 de marzo, que era cuando los feligreses se disponían a realizar ofrendas en el templo de la diosa de la Madre Tierra.

Varios siglos después, los católicos transformaron esas celebraciones politeístas para distinguir la figura de la Virgen María como la madre de Jesús y de todos los cristianos. En el santoral católico se asignó el 8 de diciembre; coincidiendo con la fiesta de la Inmaculada Concepción y aprovechando la solemnidad para elogiar ambos acontecimientos.

Pero la verdadera concepción terrenal del Día de la Madre se fraguó en 1873 por la poetisa y activista Julia Ward Howe. Esta defensora de los derechos de las mujeres escribió la Proclama del Día de la Madre y, durante un par de años, consiguió que mujeres de 18 ciudades estadounidenses se reunieran en torno a la festividad. La ciudad de Boston continuó celebrando el Día de la madre durante una década, pero sería Ana Jervis -movida por el reciente fallecimiento de su madre- la que aplicaría todos sus esfuerzos para fechar la celebración el 12 de mayo de 1907.

Finalmente, y siete años después de la propuesta de Jervis, la idea llegaría a manos del presidente Woodrow Wilson, quien determinaría el Día de la Madre en Estados Unidos en el segundo domingo de cada mes de mayo.

Muchos han sido los países que se fueron uniendo poco a poco y haciendo eco de la festividad. Como curiosidad, destacar que España mantuvo su celebración el día 8 de diciembre hasta 1965, fecha en la cual pasó a celebrarse el primer domingo de mayo.