Abanico

El origen del abanico tenemos que buscarlo en el antiguo Egipto, aunque su historia en España es muy posterior. Además, la simbología del abanico hace que sea uno de los accesorios de moda más interesantes y peculiares de la historia.

 

El invento del abanico y su historia

Es complicado saber con certeza dónde se encuentra su origen. Eso sí, en la tumba de Tutankamón ya se encontraron abanicos de grandes dimensiones con mangos de metales preciosos.

En lo referente a España, la primera mención del abanico procede de textos relacionados con el rey Pedro IV de Aragón en el siglo XIV. Por lo tanto, al menos desde entonces, el abanico existía como accesorio común en España.

Ahora bien, los primeros maestros abaniqueros no aparecen hasta el siglo XVII. Estos colaboraban con pintores de la corte creando auténticas obras de arte que solo eran accesibles a las clases más altas de la sociedad.

Sin embargo, la calidad de fabricación de los abanicos franceses e italianos era superior a la española, por lo que estos se hicieron con el mercado a principios del siglo XVIII. Eso sí, todo cambió cuando Carlos II decidió incentivar la industria desarrollándose de forma muy importante en la zona de Valencia.

Así, la historia del abanico en España comienza al menos en el siglo XIV alargándose así hasta nuestros días la leyenda de un accesorio de moda atemporal. ¡Seguro que tienes uno!