El 24 de noviembre de 1991 el líder de la conocida banda Queen falleció en su domicilio de Kensington, Londres, a causa de una bronconeumonía que no pudo superar debido a su estado físico. Un día antes confirmó públicamente que padecía SIDA aunque había tratado de ocultar la situación para proteger su vida privada y la de su entorno. Con 45 años partió no sin antes dejarnos un gran legado que le convirtió en leyenda.
Grabó 14 discos de estudio con la banda Queen además de otros dos trabajos en solitario. El último, ‘Barcelona’, al lado de la cantante de ópera Monserrat Caballé. El sencillo, del mismo nombre, se convirtió en el tema de los juegos olímpicos de 1992, un año después de la muerte del cantante.
Además de vocalista y compositor de la banda era gran apasionado de la danza e icono extravagante de los 80. Su inconfundible atuendo y puesta en escena además de su particular registro musical le convirtieron en una personalidad inimitable en el mundo de la música. 25 años después sigue sin dejar indiferente a nadie y tiene un gran número de seguidores y fans incondicionales alrededor del mundo.
A pesar de que él mismo se definía como alguien tímido su vida estuvo marcada por los excesos derivados de la fama. Cada vez que subía al escenario se convertía en una persona extrovertida y carismática que nos dejó frases como estas:
«Siempre supe que era una estrella y ahora, el resto del mundo parece estar de acuerdo conmigo.»
«Simplemente soy una prostituta musical, querido.»
«Soy tan poderoso en el escenario que parece que he creado un monstruo. Cuando estoy actuando soy un extrovertido aunque en el interior soy completamente diferente.»
«¿Qué estaré haciendo dentro de 20 años? ¡Estaré muerto querida! ¿Estás loca?»
«Si está planeado, es aburrido.»
«No seré una estrella del rock, seré una leyenda.»
Fuente imagen: Flickr / (CC BY 2.0)
