15 años del Prestige

Hoy se cumplen 15 años del desastre del Prestige, cuando el petrolero griego naufragó frente las costas de Galicia vertiendo 77.000 toneladas de petróleo.

Nadie podía imaginar que aquel 13 de noviembre de 2002 se cernía frente A Costa da Morte uno de los mayores desastres naturales de la Historia de nuestro país. Aquel día sobre las 15:00 de la tarde una llamada de socorro del petrolero hacía saltar todas las alarmas ante la inminente fuga de crudo que se podría producir de no actuar con premura y exactitud. El barco sufrió las consecuencias de un temporal, abriéndose una vía de agua en su casco. Se intentó en un primer momento alejar de la costa pero tras seis días en esta tarea, el petrolero se partió en dos, hundiéndose a más de 3.800 metros y liberando 77.000 toneladas de petróleo. Este vertido acabó con gran parte de la vida en las Rías Bajas, afectando a la fauna y flora de aquel lugar, así como a la industria pesquera que se vio sumida en una profunda crisis.

Conforme pasaban las semanas, el petróleo que seguía expulsando el petrolero hundido se acercaba cada vez más a la costa hasta que comenzando el año 2003 las manchas de crudo llegaron, originando un desastre ecológico de enormes proporciones. Kilómetros de costa cubiertos de chapapote, miles de aves y especies marinas muertas cubiertas de petróleo.

Una ola de solidaridad inundó toda España con miles de voluntarios que durante meses se afanaron en limpiar el “chapapote” que quedó esparcido y adherido por toda la costa gallega.

Se creó el movimiento Nunca Máis para ayudar en la limpieza de las costas y a su vez, para la rectificación de la legislación sobre la navegación de petroleros monocascos. De haber existido ya esta ley en España, como ocurría en muchos países de la Unión Europea, se hubiera evitado este desastre.

Lo cierto es que 15 años después, aún se esperan las compensaciones económicas para aquellos que perdieron su negocio durante años bajo el petróleo.