Leyes peculiares del mundo

Según la Real Academia Española, “ley” es el precepto dictado por la autoridad competente, en que se manda o prohíbe algo en consonancia con la justicia y para el bien de los gobernados.

 

Aunque a veces, por cuestiones históricas, de cambios en la sociedad y la forma en que se organiza, el avance de las tecnologías y otras circunstancias, hay leyes que, aunque vigentes, quedan obsoletas y pierden el sentido por el que fueron redactadas y aprobadas. Uno de los preceptos adscritos a la ley es que “su desconocimiento no exime de su cumplimiento” por lo que aunque peculiares, estas leyes pueden provocar que alguien cometa un delito por una acción que pueda parecer absurda. Ya sea por su contexto histórico o por tratar de solucionar problemas que aparentemente son de pequeña magnitud, estas leyes existen.

 

ESPAÑA

 

Nombres como Judas o Lenin están prohibidos

 

En España no está permitido inscribir a los hijos con cualquier nombre. La ley de 8 de junio de 1957 del Registro Civil prohíbe usar nombres con connotaciones negativas, por lo que nombres como Judas, Caín, Lenin o Hitler están prohibidos en España. En otros países como Gran Bretaña tampoco están permitidos este tipo de nombres: recientemente una mujer y un hombre británicos (Adam Thomas y Claudia Patatas) han sido condenados a seis y cinco años de prisión respectivamente por llamar a su hijo Adolf Hitler. Su nombre completo era Adolf Hitler Thomas Patatas.

 

Castillos de arena

 

En Tenerife está prohibido hacer castillos de arena en la playa, al menos, en dos de sus playas: Arona y Arisco. Según las autoridades “para proteger la estética de las playas”. Los delincuentes pueden enfrentarse a sanciones administrativas de hasta 750€.

 

Prohibido jugar al dominó en Sevilla

 

Una ordenanza introducida para reducir la contaminación acústica en la ciudad de Sevilla, prohibió en octubre de 2014 cualquier tipo de juego o actividad susceptible de generar ruido de impacto, por ejemplo dados, dominó y similares.

 

 

EUROPA

 

 

En Alemania es legal escapar de prisión

 

En el país germano no es delito fugarse de la cárcel. Esta ley proviene del año 1880, cuando los legisladores alemanes establecieron que estaba prohibido castigar a una persona por actuar siguiendo sus aspiraciones como humano. Como tal, la libertad es una aspiración de la raza humana, por lo que un preso tiene derecho a poder intentar fugarse de prisión. El problema es que técnicamente fugarse de la cárcel conlleva altas probabilidades de cometer algún otro delito, como romper los barrotes de la celda (vandalismo), agredir a un funcionario o utilizar el soborno para facilitar la fuga. Además, el simple hecho de que el fugado se lleve la ropa del penal ya es un delito de robo. En caso de que un preso se fugue y sea interceptado, este hecho no aumentará su condena, aunque sí puede acarrear sanciones penitenciarias y perder privilegios ya concedidos.

 

 

Asesinar a un escocés

 

En la ciudad de York (Reino Unido) es legal matar a un escocés dentro de las murallas de la ciudad siempre y cuando porte un arco con flechas y no sea domingo. Tras la consulta de un ciudadano al ayuntamiento de la ciudad de York en 2012, se confirmó que en los registros no se halla ningún caso en el que algún escocés haya sido asesinado en virtud de esta ley.

 

 

ESTADOS UNIDOS

 

Son muchas las leyes en Estados Unidos susceptibles de nombrarlas peculiares, aunque a veces la información es confusa y no siempre son ciertas. Por ejemplificar una totalmente verdadera: en Kentucky, las leyes que regulan el matrimonio, establecen que está prohibido para una mujer casarse cuatro veces con el mismo hombre. Sin embargo el hombre sí puede hacerlo.