¿Cómo están penados los crímenes homófobos en España?

En las últimas décadas el colectivo LGBTIQ+ ha luchado por conseguir que se les reconocieran como miembros de pleno derecho, luchando por el matrimonio igualitario, la no discriminación laboral basada en la sexualidad y, sobre todo, el derecho a no tener que esconderse ni en pareja ni por sí mismos.

Sin embargo, y a pesar de la normalización de las personas LGBTIQ+ que estos cambios sociales han traído, el colectivo se mantiene como uno de los grupos más amenazados por las constantes agresiones que sufren. Ejemplo de ello fue la muerte de Samuel Luiz, en julio de 2021, o la reciente ola de muertos en Bilbao, todos parte del colectivo, a manos de un supuesto asesino.

¿Qué se puede hacer ante estas agresiones? ¿Están penados los crímenes homófobos?

AGRESIONES AL COLECTIVO LGBTIQ+: CONTEMPLADAS COMO DELITO DE ODIO

Las agresiones al colectivo LGBTIQ+ están contempladas en el Código Penal como Delito de odio (artículo 510). Según indica el artículo, estos delitos se producen cuando una o varias personas discriminan a otra exclusivamente por su raza, lenguaje, discapacidad, edad, género, religión u orientación sexual. Entre los delitos de odio por orientación sexual o identidad de género se incluyen las agresiones físicas, pero también amenazas, injurias y trato degradante, entre otras.

Los Delitos de odio pueden estar castigadas por una pena básica de prisión de entre 1 y 4 años y multa de 6 a 12 meses. Los crímenes homófobos pueden categorizarse como Delito de odio también cuando se añadan como agravante de discriminación a un delito genérico, como el de lesiones u homicidio, incrementando la pena de éstos a la ya mencionada.

Según las cifras oficiales ofrecidas por el Ministerio del Interior los crímenes homófobos han incrementado de 169 casos a 282 en toda España, desde 2016 y hasta 2020 (último año registrado). Los Observatorios contra la LGTBfobia afirman que las estadísticas de los organismos oficiales casi nunca se corresponden con los casos reportados a estas organizaciones, siempre superiores.

El incremento de los delitos de odio por orientación sexual o identidad de género coincide con la irrupción de la extrema derecha en el mundo occidental y, en el caso de España, con el surgimiento y aumento de popularidad de Vox.

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