Cinco crímenes que ocurrieron en Halloween

La noche de Halloween es la noche «mas terrorífica» del año aunque cada vez deriva más en una excusa para pasar un buen rato disfrazado, disfrutando con amigos. Lo cierto es que la noche terrorífica puede acabar en una auténtica película de terror ya que se produce una combinación explosiva de alcohol, morbo por pasar miedo y el anonimato de ir disfrazado.

Durante años ha habido muchos padres en EE.UU. que prohibieron a sus hijos y a hacer el típico «truco o trato» casa por casa, por culpa de un hecho que tuvo lugar en 1974. En Texas un padre dio a sus hijos y a otros niños del vecindario chucherías envenadas. En su interior escondían cianuro que fue mortal para su hijo de ocho años, Timothy. El padre contrató antes del asesinato varios seguros de vida para su hijo para cobrarlos una vez fallecido. Ronald O´Brian fue descubierto y condenado a muerte. Fue ejecutado en 1984 y siempre será recordado como Candyman, el hombre que mató en Halloween con caramelos.

Yoshihiro Hattori era un estudiante de intercambio que quería vivir esta fiesta norteamericana. En 1992 el joven japonés, ataviado con su disfraz de John Travolta, se dirigió a la que él creía la casa en la que se celebraba la fiesta pero llamó a la puerta equivocada. El dueño de la casa, Rodney Peairs no dudó en asestarle un tiro a quemarropa al chico de 16 años matándolo en el acto. Según el detenido, se sintió intimidado por el aspecto del joven y e hizo caso omiso a su orden de «alto», que vino condicionado por el escaso inglés que el joven hablaba. El debate de la tenencia de armas y la impunidad de uso se abrió aun mas.

Otra tradición que se originó en EEUU y que cada vez es más frecuente en nuestro país es el lanzamiento de huevos. Durante esta noche grupos de adolescentes se dedica a laninzar huevos a las casa y coches de desconocidos. Esto no le sentó muy bien a Karl Jackson, quién se bajó del coche para recriminar a los jóvenes su acto. Uno de los adolescentes, Curtis Sterling de 17 años sacó  una pistola y acabó con la vida del conductor.

La noche de Halloween de 2004 en Napa, California, se tiñó de sangre en la casa de tres amigas: Lauren Meanza, Adriane Isogna y Leslie Mazzara.  Lauren se despertó sobresaltada al escuchar los gritos de pánico de sus compañeras de piso. Cuando fue a auxiliarlas pudo ver como el marido de una amiga en común había acuchillado a Adriane y Leslie. Lauren logró escapar y avisar a la policía de lo ocurrido pero sus amigas por desgracia fallecieron debido a las numerosas puñaladas recibidas. Eric Copple, el culpable, jamás reveló lo que le llevó a actuar así.

Peor no todos los crímenes ocurren en Estados Unidos, el país dónde Halloween es toda una fiesta nacional. Hace 11 años en España, concretamente en Ripollet (Barcelona) también tuvimos nuestra noche terrorífica. Un chico de 14 años asesinó a María Dolores, de la que estaba enamorado. Cegado por el despecho y los celos la degolló en un descampado cercano a la casa de la menor. Tan solo pasó cuatro años interno tras los que fue puesto en libertad.