Tecnología de Fórmula 1: De las carreras a la vida real

Deporte y tecnología van en muchas ocasiones de la mano. El diseño de los coches de competición es un ejemplo. Los avances tecnológicos que se implementan en la F1 han llegado a la vida cotidiana de formas que muchas veces no sabemos y que vamos a ver aquí.

La Fórmula 1 como impulsor del avance tecnológico

Una de las curiosidades de la Fórmula 1 se encuentra en los trajes de los pilotos. Estos tienen que aguantar al menos 11 segundos a temperaturas de 800 grados. Pues bien, su desarrollo fue aprovechado hace años por los bomberos que así consiguen proteger sus vidas de las altas temperaturas.

La fibra de carbono comenzó a usarse por parte del equipo McLaren en los años 80. Ligera y extremadamente resistente, hoy puede encontrarse en bicicletas, coches de calle, cascos y un largo etcétera de productos que no serían posibles sin la F1.

Otra tecnología que ha saltado de los coches de competición a las calles es la del KERS. Se trata de un dispositivo que aprovecha la energía producida en las frenadas para alimentar de nuevo al motor. Los modelos híbridos la usan, pero también muchos trenes, vagones de metro e incluso camiones.

Por último, el habitáculo de los pilotos de F1 está preparado para ser una cápsula de salvamento en caso de accidente. En su diseño se inspira la Babypod II, una incubadora que ha salvado muchas vidas.