Un bonito día de campo o las esperadas vacaciones pueden truncarse por una picadura o mordedura de animal o «bicho». Por ello no está de más saber qué hacer en caso de sufrir este percance.
La mayoría de picaduras mordeduras producen picazón, quemazón o una leve hinchazón. En esos casos hay que quitar el aguijón (en caso de que se haya quedado en la piel), lavar con agua y jabón la zona y aplicar hielo o agua fría para bajar la hinchazón. Una vez lleguemos a nuestra casa o alojamiento las cremas con bajas dosis de hidrocortisona o incluso un antihistamínico alivian y hacen desaparecer las consecuencias del percance.
Cuando debemos preocuparnos es si los síntomas son más graves como dificultad para respirar, mareo, nauseas y vómitos o hinchazón en labios, párpados y garganta. Para ello, tendremos que acudir urgentemente a un centro hospitalario o llamar a emergencias para buscar ayuda.
En ocasiones puede que el pedir ayuda o acudir a un centro médico no sea posible, para ello lo primero es no dar nada de beber a la persona afectada así como aflojar la ropa ajustada y taparle con una manta. También evitar que le de la luz del sol directa así como evitar aplicar hielo en la picadura, presionar la herida o hacer cortes cerca ya que podría provocar hemorragia y contaminar la zona.
Lógicamente son aspectos generales para las picaduras o mordeduras ya que hay ciertos animales o insectos que requieren de medidas extraordinarias hasta que se consigue ayuda. La recomendación antes de emprender una ruta o viaje por una zona desconocida es informarse bien de la fauna y flora existente para en la medida de lo posible, estar preparado por si pudiera producirse algún problema.