En nuestra serie de estreno #ExpedienteRobLowe, el famoso actor Rob Lowe y sus hijos investigan fenómenos paranormales a lo largo y ancho de los Estados Unidos. En su recorrido buscan fantasmas, extraterrestres e incluso al mismísimo Bigfoot. Pero no hay que irse tan lejos para descubrir infinidad de seres legendarios semejantes, que a pesar de no tener una explicación, han pasado a formar parte de nuestra mitología popular.
Su creencia casi siempre tiene su origen en las historias transmitidas, de generación en generación, de aquellos que lograron sobrevivir a un encuentro con algunas de estas figuras legendarias, de las que te contamos algunas curiosidades:
- El Busgosu
Esta criatura, también conocida como Musgosu, es mitad hombre, mitad cabra. Luce cornamenta y su cuerpo está recubierto de espeso pelo. Sus orejas puntiagudas le otorgan un aspecto diablesco. La tradición cántabra le otorga un papel benefactor, como protector y guía de pastores, mientras que el mito asturiano le considera el señor del bosque, enemigo encarnizado de leñadores y cazadores. Su beso contagia la tisis, provocando una muerte lenta y dolorosa.
- Tartalo
La cultura popular vasca lo representa como un descomunal cíclope, una raza de gigantes con un solo ojo en mitad de la frente. Morador de las montañas, posee una fuerza descomunal que ejercita tirando grandes piedras de un monte a otro. Su comportamiento agresivo y costumbres antropófagas (se alimenta de ovejas, niños y algún que otro adulto) incrementa el terror que provoca.
Representación Tartalo en Zizur Mayor (Zaloa Etxaniz)
- Los Nuberus
Estos personajes, representados como hombres de gran altura y aspecto envejecido, llevan vestimenta oscura y sombrero picudo de ala ancha. Controlan el tiempo a voluntad, provocando tempestades y tormentas por diversión, que arruinan cosechas y matan el ganado. Durante las horas de oscuridad los lugareños encienden cirios y hacen tañer las campanas para ahuyentarlos.
- El Basajaun, Bonjarau, Bosnerau:
En la tradición vasca, navarra y aragonesa, se trata de un gigante de larga melena y fuerza colosal con una pierna en forma de tronco de árbol (por lo que sus huellas se asemejan a las de un pie humano o base de árbol). En este caso, a pesar de su terrorífico aspecto, se le considera el protector de los bosques y rebaños. Sus gritos y silbidos en la montaña advierten a los pastores de la llegada de tormentas o del ataque de las fieras, por lo que en agradecimiento a su protección, la costumbre es recompensarle con un trozo de pan, que el Basajaun recoge cuando estos duermen.
Si compartes con Rob Lowe la creencia de que “un mundo en el que Bigfoot y los extraterrestres existen, es más interesante y divertido”, #ExpedienteRobLowe es tu serie.
¡Atrévete a creer hoy a las 22:00h!
