Último asesinato conocido de Dennis Nilsen

Dennis Nilsen mató, profanó y descuartizó a 15 jóvenes entre 1978 y 1983. Nació el 23 de noviembre de 1945 en Fraserburgh, Escocia. El matrimonio de sus padres resultó un fracaso y como consecuencia él vivía con su abuelo materno, a quien adoraba. Nilsen afirmó que contemplar el cuerpo inerte de su abuelo tras su muerte le condujo a su posterior adoración por los cadáveres. Su madre se volvió a casar y tuvo 4 hijos más y Nilsen se convirtió en un niño solitario y reservado.

Nilsen trabajó como cocinero de la Armada británica y, más tarde, comenzó entrenamiento policial, donde descubrió gran fascinación por las visitas a la morgue a contemplar las autopsias. Llegó a encargarse de las entrevistas de aspirantes. Su primer incidente con la policía tuvo lugar en 1973. David Painter, un chico joven que Nilsen había conocido a través de su trabajo, afirmó que había realizado fotografías de él mientras dormía. Painter se encontraba tan afectado que requirió ayuda médica como resultado de la conmoción. Nilsen fue interrogado por el incidente pero fue puesto en libertad sin cargos.

En 1975 compartió piso con David Gallichan en el norte de Londres durante dos años. Aunque Gallichan negó que mantuvieran ningún tipo de relación, cuando este le abandonó, Nilsen entró en una espiral depresiva de alcohol y soledad que culminó en su primer asesinato 18 meses después. Estranguló a un chico con el que había mantenido relaciones sexuales la noche antes para poder observar su cadáver.

Nilsen sentía atracción sexual por los cuerpos, los cuales conservaba durante meses. Después los descuartizaba y quemaba para tirar los restos por el desagüe. Los vecinos no aguantaban el olor de las cañerías y cuando llamaron al fontanero encontraron carne humana putrefacta en las tuberías. Finalmente, Nilsen fue condenado a cadena perpetua.